Solicitar una hipoteca paso a paso | 7 Pasos

Solicitar una hipoteca constituye una decisión de mucha trascendencia, dado que implica adquirir un compromiso financiero de larga duración. Por consiguiente, es imperativo seleccionar con calma y valorar todas las opciones y alternativas hasta dar con la más idónea.

El proceso de contratar una hipoteca se erige como una travesía extensa, demandante de dedicación y esfuerzo. Invertir tiempo en la recolección de información y en un análisis minucioso de las diferentes opciones y posibilidades se torna esencial para obtener la financiación más ventajosa. En este sentido, el propósito de esta guía radica en esclarecer cada etapa, facilitando así el trámite para solicitar una hipoteca y agilizar la compra de tu nuevo hogar.

¿Qué es un hipoteca?

Una hipoteca representa un convenio financiero mediante el cual una persona puede obtener la adquisición de una propiedad, comúnmente una vivienda, mediante la obtención de un préstamo otorgado por una entidad bancaria u otra institución financiera. Este préstamo se respalda utilizando la propiedad como garantía, lo que implica que, en caso de falta de cumplimiento en los pagos, el prestamista posee el derecho de enajenar la propiedad con el fin de recuperar los fondos prestados.

7 pasos fundamentales para solicitar una hipoteca

Una vez tomada la decisión de adquirir una vivienda y la necesidad de solicitar una hipoteca, es fundamental realizar una exhaustiva recopilación de información previa para evitar cualquier error. Es esencial familiarizarse con el panorama del mercado hipotecario, por lo que se debe emprender la búsqueda, comparación y análisis de las ofertas de la mayor cantidad de entidades bancarias posible.

1. Recopilar información y comparar entre las distintas hipotecas disponibles

Como compradores, es crucial reflexionar antes de solicitar una hipoteca sobre cuál se ajusta mejor a nuestras necesidades. Debemos evaluar nuestra capacidad para hacer frente a los pagos periódicos, determinar el plazo de amortización y analizar nuestros ahorros, incluyendo márgenes para posibles gastos imprevistos. Además, es recomendable conocer nuestra cuota de endeudamiento y asegurarnos de que no supere el 30-35 % de nuestros ingresos netos.

En este primer paso hacia la contratación de nuestra hipoteca, la comparación es clave. Al revisar diversas ofertas de préstamos hipotecarios ofrecidos por diferentes entidades financieras, podemos identificar diferencias y comprender mejor lo que nos están ofreciendo.

Durante este proceso de recopilación de información previo a la solicitud de la hipoteca, es aconsejable anotar todas las dudas que surjan para plantearlas posteriormente a los profesionales. Las condiciones y requisitos de una hipoteca pueden incluir términos difíciles de entender que podrían generar confusión. A continuación, analizaremos algunos de los más relevantes.

2. Conocer los tipos de hipotecas

Existen tres tipos principales de hipotecas según el tipo de interés:

  • Hipotecas a tipo fijo. En este caso, el tipo de interés permanece constante a lo largo de toda la duración del préstamo hipotecario acordado. Las cuotas mensuales se mantienen estables durante toda la vida del préstamo. Optar por este tipo de hipoteca puede ser una opción atractiva si el tipo fijo ofrecido es lo suficientemente competitivo para comprometerse con el banco a largo plazo. Sin embargo, dado que los costos de subrogación suelen ser elevados (pueden alcanzar hasta un 4% o más), es crucial analizar minuciosamente las condiciones antes de firmar el contrato.
  • Hipotecas a tipo variable. En estas hipotecas, las cuotas mensuales permanecen constantes durante cada periodo de revisión, pero varían según el tipo de referencia hipotecaria cuando se lleva a cabo dicha revisión. En España, la mayoría de los préstamos hipotecarios adoptan este modelo, con un sistema de amortización de cuotas constantes o sistema francés y un tipo de interés variable.
  • Hipotecas a tipo mixto. Estas hipotecas combinan un tipo de interés fijo con otro variable. Una parte del interés se ajusta de acuerdo con un índice de referencia (generalmente el euríbor), mientras que el otro permanece fijo según lo acordado inicialmente.

3. Conocer los requisitos que te pide el banco para pedir una hipoteca

Los requisitos principales al solicitar una hipoteca están relacionados principalmente con la solvencia económica del solicitante, aunque no son los únicos aspectos a considerar:

  • Ingresos estables. La estabilidad financiera es fundamental al contratar una hipoteca. El banco requerirá información como las nóminas y el historial laboral para evaluar adecuadamente el flujo de ingresos del cliente.
  • Buena solvencia económica. La aprobación de la mayoría de los préstamos hipotecarios está condicionada a la ausencia de deudas pendientes por parte del solicitante.
  • Demostrar ahorros. Es crucial demostrar disponibilidad de ahorros al solicitar una hipoteca. Idealmente, estos ahorros deberían ser suficientes para cubrir el pago inicial de la vivienda y los gastos asociados a la compra, aproximadamente el 30% del valor de compra del inmueble.

El 20% correspondería a la parte del precio de la vivienda no cubierta por la hipoteca, ya que la mayoría de las hipotecas en España financian hasta el 80% del valor de tasación o compraventa.

El 10% restante se destinaría a cubrir gastos como la tasación y los costes de registro de la propiedad, escritura, etc.

  • Límite de financiación y periodo de amortización. Las hipotecas tienen un límite de financiación, generalmente hasta el 80% del valor del inmueble, y un plazo de amortización determinado, que suele oscilar entre los 20 y los 30 años.
  • Historial de morosidad. Los bancos y las entidades financieras suelen evaluar si el solicitante ha estado inscrito en listados de morosidad. La ausencia de registros en estos listados sugiere responsabilidad en los pagos financieros, lo que puede ser un factor positivo para la aprobación de la hipoteca.
  • Posibilidad de avales. En ciertos casos, el banco puede requerir avales para incrementar la seguridad en los pagos de la hipoteca. Estos avales pueden ser bienes materiales, como ahorros u otros inmuebles, o avales personales, donde otra persona se compromete a responder por los pagos en caso de incumplimiento por parte del titular.

4. Contacta con los bancos

Una vez analizada la oferta, el siguiente paso es ponerse en contacto con la entidad cuya hipoteca parece ser la más adecuada y que se ajusta a tus necesidades. En este punto, el banco está obligado a proporcionarte un documento crucial: la Ficha de Información Precontractual (FIPRE). En esta ficha se resumen todos los términos de la financiación, desde el importe solicitado hasta el plazo de amortización, pasando por los tipos de interés, las comisiones, los productos bonificados, entre otros aspectos relevantes. Es en este punto donde comienza la negociación con el banco.

5. Prepara los documentos necesarios

Para seguir con el proceso, el banco solicita una serie de documentos para estudiar el perfil financiero y económico de las personas que solicitan la hipoteca. Es muy importante tener todos los papeles preparados y entregarlos en las fechas indicadas. .

Los documentos más habituales que pide el banco (cada entidad tiene sus propios criterios) son, entre otros, el DNI, la vida laboral, las últimas nóminas, recibos de pagos de otros préstamos que tengas. Te los detallamos en el apartado Documentación para solicitar una hipoteca.

6. Haz una provisión de fondos 

Realizar las gestiones asociadas a una compraventa, como la elaboración de escrituras y el pago de impuestos, conlleva un costo. Para cubrir estos gastos, el banco requerirá que adelantes una cantidad de dinero, lo que se conoce como provisión de fondos. Una vez concluido el proceso burocrático, la entidad te reembolsará las facturas correspondientes con el coste de dichas gestiones. En caso de haber adelantado más dinero del necesario, el banco te devolverá la diferencia.

7. Firma la escritura

Finalmente, llega el momento de la firma de la hipoteca, un paso crucial que también se realiza en la notaría. En este proceso, es indispensable la presencia de un representante del banco, así como del vendedor y del comprador del inmueble. Durante la firma, se procederá a la entrega de los cheques correspondientes, y una vez completada esta etapa, se considerará finalizada la solicitud de la hipoteca.

#ProTip Es vital no conformarse con una explicación general o superficial. Antes de firmar cualquier documento, es fundamental solicitar toda la información necesaria y plantear todas las preguntas pertinentes para asegurarse de comprender plenamente todos los términos y condiciones de la hipoteca. No dudes en preguntar sobre cualquier aspecto que no entiendas para evitar confusiones en el futuro. Es tu derecho como cliente estar completamente informado y seguro antes de comprometerte con un préstamo hipotecario.

Conclusiones 

La solicitud y contratación de una hipoteca es un proceso complejo que requiere atención meticulosa a cada detalle. Desde la comparación de diferentes ofertas hasta la firma del contrato en la notaría, cada paso implica importantes decisiones financieras y compromisos a largo plazo. Es esencial no subestimar la importancia de entender completamente los términos y condiciones de la hipoteca, así como de hacer todas las preguntas necesarias antes de firmar cualquier documento. La búsqueda de claridad y comprensión en cada etapa del proceso garantiza una toma de decisiones informada y una transacción hipotecaria exitosa.

Estamos seguros de que con estos consejos podrás comprar sin errores una vivienda y escoger la hipoteca que mejor se adapte a tus necesidades.

Compartir:

Facebook
Twitter
Pinterest
LinkedIn