Te traemos una lista de consejos para que puedas limpiar el baño más fácilmente y tener esta estancia reluciente durante más tiempo.
Disponer de un buen baño en casa es fundamental. Se trata de una zona que debes mantener siempre limpia y desinfectada. ¡Vamos a ver los 10 consejos principales para cuidar tu baño!
- Debes realizar una limpieza diaria. Aunque lógicamente no sea en profundidad, es crucial darle un repaso al baño en el día a día para que más o menos esté limpio y no se acumule demasiada suciedad. Barrer y fregar, por ejemplo, son dos cosas que puedes hacer cada día y no te ocupan demasiado tiempo.
- Desinfectar, tan importante como limpiar. En esta estancia se acumulan muchos gérmenes y suciedad, motivo por el cual es imprescindible que más allá de que limpies el baño, también te asegures de que está desinfectado.
- Evita la creación de moho ventilando la humedad. Una buena ventilación es crucial para que el baño permanezca limpio a largo plazo. Asegúrate de abrir bien las ventanas
después de ducharte para que la humedad pueda desaparecer y deja la puerta abierta. Si dejas que la humedad se instale en el baño como un inquilino más, sucederán tres cosas: se generará moho, la pintura (en el caso de que la hubiera) se verá mermada, y los materiales de tus muebles (los de madera o contrachapado, sobre todo) se deteriorarán. - Las cortinas del baño también hay que lavarlas frecuentemente. Por un lado, cada vez que te duches, no cuesta nada darle un agua para eliminar restos de gel o champú que se puedan haber quedado en la cortina. Por otro lado, es necesario meterla en la lavadora, cada dos semanas es un timing acertado. Es importante mantener las cortinas limpias porque suele acumularse moho en la base.
- La escobilla está ahí para usarla. Puedes darle un repaso al retrete a diario con desinfectante y así lo mantendrás limpio durante toda la semana. Pero además, la escobilla en sí debe limpiarse con frecuencia porque, como es lógico, ahí sí que inevitablemente se acumulan bacterias y suciedad. Déjalo en remojo unos 10 minutos con agua y lejía.
- Un desagüe limpio y sin malos olores. Es frecuente que en el desagüe se queden pelos atrapados y eso genera obstrucciones en las tuberías lo cual, a su vez, acabará provocando malos olores. Para ahorrarte este problema, asegúrate de que no se acumule nada en el desagüe y échale un poco de bicarbonato de sodio y vinagre a esta zona para limpiarla en profundidad.
- Azulejos brillantes. Con una esponja y el mencionado bicarbonato de sodio, puedes hacer que tus azulejos recuperen su brillo. Darle un segundo repaso con una mezcla de vinagre y limpiador de baño, terminará de eliminar las manchas más resistentes.
- Sácale brillo a la alcachofa ¿El truco? Remojarla en un cubo con agua y vinagre. Déjala toda la noche en remojo de forma que el vinagre pueda actuar disolviendo la cal acumulada. ¡Este truco dejará tu ducha reluciente como el primer día!
- Es mejor que uses jabón líquido que de barra, porque el sólido se va disolviendo en mini trocitos que se quedan incrustados en las juntas de la ducha y cuestan más de limpiar.
- Dedícale 5 minutos a pasar una bayeta limpia por las superficies del baño. Te será más fácil si en lugar de tener que ir a buscar esa bayeta, te dejas siempre una limpia en uno de los percheros o siempre una seca en un cajón. Si lo haces después de darte una ducha, será ideal porque todo estará humedecido y así será más sencillo de limpiar. No es necesario ni que uses un producto de limpieza, aunque, lógicamente, si puedes tener a mano alguno, ¡esta rutina será aún más provechosa!
¿Qué conseguirás pasando una bayeta a diario? Eliminar el polvo, restos de gel, de pasta de dientes, de maquillaje, pelos, etc. Y, lo más importante, ¡tendrás un baño limpio durante más tiempo!
Consejos extra de limpieza baño que no te puedes perder
Tenemos algunos otros tips que quizás pueden resultar un poco menos evidentes que te facilitarán el tener un lavabo limpio el mayor tiempo posible:
- El que lo usa debe dejarlo como lo ha encontrado. Esto, en pareja, puede llegar a ser motivo de rifirrafe, pero es muy importante acordar que cada cual tiene que responsabilizarse de dejar el baño limpio para la siguiente persona que lo use. En el caso de que tengas hijos, esto resulta mucho más difícil, porque el nivel de exigencia (sobre todo cuánto más pequeños sean) es mucho más bajo. No obstante, eso no significa que no puedas pedirles unos mínimos: nada de ropa en el suelo, el cepillo de dientes o el peine (lo que sea que haya usado) tiene que guardarse en su sitio, etc.
- Un buen aroma. Lo mejor para contrarrestar los olores del baño, es echar mano de aromas cítricos y florales, porque resultan frescos. La lavanda es una excelente opción, por ejemplo. Es muy sencillo colocar un ambientador mikado o un dispensador automático en alguna esquina del lavabo para que pueda ir desprendiendo ese buen olor y así mantener la estancia agradable para todo el mundo.
