Qué alternativas hay a la vivienda tradicional

Hoy en día, quienes piensan en la posibilidad de comprar una vivienda tienen frente a si un amplio abanico de posibilidades. 

En primer lugar, está la elección del tipo de vivienda en la que quieren vivir o en la que quieren apostar como inversión. Y es que actualmente hay muchas tipologías de vivienda diferentes, adecuadas para unos u otros en función de los gustos de cada uno, el estilo de vida, etc.

Alternativas de vivienda que debes conocer en 2023

A continuación, te enumeramos algunas de las alternativas más populares a la vivienda tradicional.

1. Contenedores: ahora mismo es una de las alternativas que mas gusta a los compradores porque son mucho más asequibles, además de tener un plus de sostenibilidad.  Además, difícilmente se te quedaría pequeña tu casa en el caso de optar por este estilo, porque si quieres ampliarla, es tan fácil como añadir otro contenedor al lado. Lo que sí que necesitas, lógicamente, es suficiente terreno para ello.
2. Casas prefabricadas: son una alternativa eficiente de vivienda sostenible y ecológica. Se construyen con mucha más rapidez que la vivienda tradicional y a un precio más bajo. Puedes hacerte con tu hogar en un plazo más corto y los acabados y materiales tienen poco o nada que envidiar al de las tradicionales casas.
3. Sobre ruedas: esta es la opción de muchas personas alrededor del mundo que adoran el estilo de vida nómada, la posibilidad de desplazarse con su hogar allá donde quieran estar, sin ataduras a un mismo lugar. Caravanas e incluso camiones pueden convertirse en un nidito sobre ruedas de ensueño.
4. Casas en edificios que solían tener otro uso: también está muy ampliamente extendida la tendencia de darle un nuevo uso residencial a un edificio que anteriormente tenía otra utilidad (como un local comercial, un almacén, unas oficinas, etc). Casas flotantes: Vivir en un barco también es una opción, aunque no sea para el gusto de todos y solo es posible en lugares específicos (en la costa, con puerto, etc).

Propuestas alternativas a la vivienda tradicional a través de una hipoteca

Por otro lado, a parte de la alternativa al tipo de inmueble en sí, también hay alternativas a la tradicional hipoteca. 

• Vivienda de nuda propiedad: ¿En qué consiste esto? Se trata de una opción bastante desconocida en España, y consiste en que el comprador adquiere una vivienda a un precio muy inferior al que tiene ese inmueble en el mercado, y lo hace a cambio de permitir al antiguo propietario seguir viviendo ahí hasta que fallezca.
• Cooperativa: una de las principales ventajas de esta opción es que puede llegar a reducir los costes hasta un 20% si lo comparamos con una compra tradicional. Esto es cuando un grupo de personas pasan a ser promotores después de comprar un terreno, puesto que entonces es ese grupo el que debe contratar a la constructora que levante las viviendas. Cuando se pone punto final a la construcción, las personas que conforman esa cooperativa pasan a ser los propietarios. Este grupo se encargará de contratar a una constructora que edifique las viviendas en su lugar. Al acabar la construcción, los promotores/cooperativistas serán los nuevos dueños.
• Alquiler con opción de compra: en este tipo de contratos de alquiler, hay un apartado en dicho documento donde se especifica que el inquilino puede optar a adquirir la vivienda cuando venza su contrato. ¿A qué precio? Este deberá estar estipulado en el contrato de alquiler y se descontarán las mensualidades que ya hayan sido abonadas durante el alquiler. Este modelo tiene una buena ventaja y un inconveniente: el inquilino puede ir haciendo hucha para el crédito hipotecario mientras esté alquilando, pero la desventaja es que cuando llegue ese momento de optar a compra, cabe la posibilidad de que el precio pactado supere el del valor del mercado.

• Vivienda con derecho de uso: en este tipo de inmuebles, la propiedad es de una cooperativa que le da permiso a alguien para vivir allí indefinidamente sin comprar. En este caso, los socios de la cooperativa abonan al inicio una aportación junto con una mensualidad para tener el derecho de uso. Esta es una buena opción para alguien que no tenga la posibilidad de acceder a una hipoteca.

• Copropiedad o multipropiedad: en este caso, la propiedad está repartida en dos partes o más con un valor equitativo y los gastos se reparten porcentualmente.

Conclusiones

Si te estás preguntando si eres el perfil de comprador que se interesa por este tipo de viviendas alternativas a la tradicional puedes salir de dudas revisando si te identificas con los 3 puntos de esta breve checklist: 

• Quieres una vivienda de la que puedas disfrutar cuanto antes, no quieres estar años esperando a que esté lista.
• No estás encontrando en el mercado el tipo de casa que buscas y en la zona donde la quieres.
• Te preocupa el medioambiente y el consumo energético.

Como has podido comprobar, hay diferentes alternativas según la situación de cada uno, así que antes de plantearte comprar un inmueble, ¡vale la pena analizar tus opciones!